La leyenda cuenta que el medio ambiente que en años anteriores era diverso, rico e interminable, la fauna y la flora estaban en cada paisaje, que las fuentes y cascadas eran abundantes.
Que los aborígenes cuidaban de estos ecosistemas como su propia vida,  hace parte del pasado esta historia pues ahora la destrucción y el calentamiento global hacen que la lucha entre seres humanos en un futuro no sea por armas si no que mas bien sea por 
agua, una realidad que asusta y que no deja vivir en paz a futuras generaciones.

La crianza ecológica desde el hogar en estos tiempos no es tan fuerte, la contaminación abunda, el mal manejo de las basuras y el uso indiscriminado de energía pueden desatar una tragedia global, hemos perdido el amor por la vida, las buenas costumbres y eso es un detonante que no tiene fecha, nos preocupamos por la vanidad y no miramos al eje que sustenta estos pensamientos, la vida perdió valor, vale mas un celular o un computador, la sensación de desesperanza es alta pero aun hay solución, si actuamos ahora todo puede cambiar, la mentalidad debe volver a lo básico, a provechar los recursos de buena manera, no es tan difícil, la conciencia ecológica debe prevalecer, la vida esta en juego y de eso nos encargamos nosotros.